EN KIOTO

Hoy hemos idos al barrio de Demachi Yanagi y como hacia un sol de justicia hemos decidido pasar un dia campestre y hemos optado por Kurama, donde hay un oncen. Antes de ir al oncen, hemos decidido ir andando un pueblecito que se llama Tibune.
Para ir de Kurama a Tibune tienes que pasar por un caminito de montanya, durante una hora y media pero el paseo es muy guay, entre arbolitos enormes, levantas la cabeza y los ves ahi tan gigantes y por el camino te vas encontrando templos y pequenyas pagoditas. El suelo esta lleno de raices enormes, pero lo peor ha sido la bajada Sandra ha vuelto a perder la cadera y yo me he dejado la pelvis en una pagoda. Pero cuando llegas a pueblo de Tibune flipas, es muy chulo aunque esta lleno de turistas Japoneses y lleno de restaurantes superguapos que estan encima del rio que pasan por el rio. Nosotros hemos comido en un restaurante muy bonito, con los pies en el agua y superfresquitos con el ruido de las cascadas de fondo.
Por la tarde hemos ido al oncen de Kurama, esta en la parte de arriba del pueblo.
El oncen son unas piscinitas con chorritos de agua caliente y fria que estan algunas en el exterior y otras en el interior, no son mixtas y te banyas en bolas, por suerte no habia mucha gente, y ha sido un gustazo despues del dia campero banayarte con las montanyitas como decorado de fondo, ver el atardecer dentro dentro de la piscinita te sientes en perfecta armonia con todo y con todo lo que hemos sudado es de agradecer.
Al dia siguiente nos hemos decidido a ir un sitio mas rural, un pueblo llamado Takayama. Ir a Takayama es como si vas de Barcelona a pasar el dia a Zaragoza, esta a tres horas pero nos apetecia un dia rural. Jo tia!!!
Takayama Tiene una parte muy pintoresca que conserva lo que fue un antiguo pueblecito Nipon, es muy chulo aunque hacia tanto calor que nos sentiamos como una bola de carne en una olla de agua hirviendo y con los sudores nos dan ataques de risa, a mi me da por hacer fotos absurdas y a Sandra es capaz de asesinar por una sombra. Hemos pasado un dia muy agradable aunque todo hay que decirlo nos ha resultado algo girilandia, ya que hay muchas calles llenas de tiendas donde venden souvenirs, algunas de los mas friki.
Hoy es nuestra ultima noche en Kioto manyana nos vamos a Osaka, con el tren bala es un plis plas, me da cosita aunque tengo que decir que tengo la ganas decirle adios a la pava del Riocan, tengo la espalda rota y eso de cerrarlo todo a las once de la noche es un poco fiasco.
Nos vamos de Kioto con un buen sabor de boca, nos ha fascinado, estamos flipando porque todo esta realmente limpio, TODO.... es una gozada, ir a cualquier sitio y no ver ni una colilla, la gente no fuma por las calles *estoy fumando poquisimo*, no come por las calles, no beben, no hay ni papeleras. Al final no esta resultando tan caro como pensabamos, la verdad es que no es tanto como dicen y todo esta superbien comunicado, los transportes hiperpuntuales y superapidos, miedo me esta dando cuando lleguemos a Barcelona, ya a ser como retroceder en el tiempo.
besitos

Sylver